11 diciembre 2018

Estas Navidades, ¡turrón de arroz!



Navidad, Navidad, dulce Navidad… Increíble, pero cierto, ya tenemos encima las Navidades 2018. Reunirse con la familia, poner el belén y árbol, comprar y recibir regalos y, cómo no, disfrutar de los dulces típicos de estas fechas. Polvorones, mazapanes, roscón de reyes, roscos de vino, mantecados y, por supuesto, ¡turrón!

En los últimos años han proliferado un montón de nuevos sabores para la receta de turrón de toda la vida. Además de los 2 tipos de almendra, ahora tenemos de fresa, plátano, limón… pero si hay uno adictivo a más no poder, ese es el turrón de arroz con chocolate. Por ello, para estas fiestas, te proponemos que ¡elabores el tuyo propio!

Ingredientes necesarios

       285 gramos de chocolate. 130 tendrán que ser de chocolate con leche y 155 de chocolate negro (de porcentaje de cacao del 70% o superior). Estas cantidades están orientadas a que tu turrón de arroz tenga un sabor muy puro de chocolate, pero si eres más de chocolate con leche o blanco, pon 285 gramos de esa variedad.
      110 gramos de mantequilla
      110 gramos de arroz inflado. Lo puedes comprar ya preparado o elaborarlo tú mismo, según la receta que compartimos el pasado año.

Pasos para preparar turrón de arroz con chocolate

Lo primero que debes hacer es poner al baño María los 110 gramos de mantequilla. Para ello, introdúcela en una cazuela, en la que ya habrá un dedo de agua, y vigila que se derrita (a fuego lento), pero ¡que no se queme!

Cuando la mantequilla se haya derretido, agrega el chocolate con leche (mucho mejor si lo has troceado previamente) y deja que se derrita. Una vez haya ocurrido, añade el negro (igualmente, se derretirá con mayor facilidad si lo has troceado antes) y deja que se funda con los otros 2 ingredientes.

Con una cuchara de madera, ayuda a la mezcla a integrarse. Así, cuando todo se haya derretido y conformado una única crema, apaga y retira la cazuela del fuego.

Entonces, coge los 110 gramos de arroz inflado e incorpóralos al chocolate y mantequilla fundidos. Para que los granos de arroz se integren de la mejor manera, te recomendamos que los incorpores a cucharadas (por cada una, remueve por toda la masa) y que te asegures de que quedan extendidos por toda la masa.

Al finalizar con eso, vierte la masa en un molde de forma rectangular y mételo en el congelador.

Transcurridas 2 horas, ¡ya podrás disfrutar de un delicioso turrón de arroz y chocolate casero!
La Navidad es la época más familiar del año y, precisamente por ello, a veces, también resulta la más agotadora por la preparación de cenas y comidas de platos complicados para muchas personas, las visitas…

En definitiva, que lo que menos apetece es ponerte a elaborar “platos extra”. Por eso, te recomendamos los platos para llevar a casa, gracias a los cuales sí tendrás tiempo para elaborar turrón de arroz casero.

Y si lo que quieres es vivir unas Navidades diferentes con las que dejar a tus familiares y amigos con la boca abierta, ¡te invitamos a que consultes la carta de L’Arruzz y vengas a comer a nuestro restaurante!

De una forma o de otra, no olvides disfrutar. Además, tanto si vienes a hacernos una visita como si no, desde L’Arruzz Albacete te deseamos una ¡Feliz Navidad 2018! y ¡Feliz 2019!


20 noviembre 2018

Koshari abu gibba y otras 2 recetas de esencia africana



Tan cercana y, a la vez, tan lejana. Así es África, el continente dotado de las mayores riquezas en el que viven las personas más pobres de todo el planeta. Efectos de la colonización, multitud de guerras civiles, altísimas tasas de corrupción o injerencias internacionales son algunas de las causas de que la realidad africana esté tan alejada de la de su vecina europea.

Desde 1989, el 20 de noviembre es el Día de la Industrialización de África, proceso indispensable para mejorar las condiciones de vida de sus habitantes. A este respecto, ¿qué sabes del continente africano? Seguro que, sobre todo, generalidades que dificultan apreciar la variedad cultural que lo compone. Desde L’Arruzz, queremos poner nuestro granito de arena (o de arroz, según se mire) para acercar África a nuestra vida cotidiana y, por eso, este mes, os recomendamos 3 deliciosas recetas propias de este fascinante continente.

Desde Egipto, Koshari abu gibba

En general, cuando se habla de arroz, se piensa en la Comunidad Valenciana y en Asia. Pues bien, estos no son los únicos lugares del mundo donde el arroz es una parte fundamental de la gastronomía.

De hecho, en muchos países de Sudamérica se come más arroz que pan y, desde luego, también es un ingrediente clave en cientos de recetas de África, como el Koshari abu gibba, plato tradicional de la patria de Cleopatra.

Ingredientes necesarios:

  • Aceite de oliva virgen extra
  • 2 cebollas
  • 1 cabeza de ajo
  • 1 kilogramo de macarrones
  • 750 gramos de lentejas (las que son marrones)
  • 1 kilogramo de arroz
  • Pimienta comino
  • 30 mililitros de vinagre
  • 5 tomates
  • Garbanzos de bote (añadido opcional)

Para disfrutar de este plato en tu paladar, lo primero que tienes que hacer es coger una sartén y calentar, en ella, la misma cantidad de aceite necesaria para hacer un huevo frito, es decir, la justa y necesaria.

Pasados unos minutos, tras haber cortado las cebollas, añádelas y saltéalas. Cuando estén listas, retíralas del fuego y reserva.

Después, con el mismo aceite, fríe un tercio del ajo, previamente picado, y, como en el paso anterior, reserva.

A continuación, en una cazuela con agua, ponte a cocer la pasta. Mientras se va haciendo, escurre las lentejas, para, seguidamente, calentarlas en litro y medio de agua.

Cuando el agua esté ebullendo, añade el arroz y pimienta y comino. De estos 2 últimos condimentos, la cantidad es al gusto. Una vez tengas todo en la olla, pon la tapa de la misma encima y baja la potencia del fuego a lento. Tras 20 minutos o el tiempo que lleve que se absorba todo el agua, añade vinagre y otro tercio del ajo.

Mientras la olla sigue a fuego lento, pela y trocea (en dados preferiblemente) los tomates (así te será más fácil elaborar la salsa). En otra cazuela, saltea los tomates y, cuando estén, lo que queda del ajo y pimienta para sazonar. Reserva y vuelve a la olla del arroz, lentejas… para apagar el fuego.

Conforme se va enfriando, escurre la pasta y añádela. Remueve y deposita en una fuente. Seguidamente, sobre el arroz, lentejas, pasta, etc, vierte la salsa de tomate, si quieres, algunos garbanzos escurridos, y ¡disfruta del Koshari abu gibba!

Calulu, plato estrella de la gastronomía de Angola

Este país atlántico, situado en la mitad sur del continente africano, formó parte del Imperio Portugués. Por ello, su gastronomía presenta una gran influencia lusa. Eso sí, desde que Angola es un estado independiente (1974), la población del país ha apostado por recuperar, en la medida de lo posible, el componente más africano de todos y cada uno de sus platos.

No obstante, con el calulu, Angola no ha hecho esa “desportugalización”, tal vez, porque es difícil saber a ciencia cierta si el pescado del plato fue incorporado por los colonizadores o ya estaba presente antes de su llegada.

Ingredientes que necesitarás:

  • 2 kilogramos de pescado (seco y ahumado)
  • 1 cebolla picada en trocitos muy finos
  •  3 tomates picados
  • 1 chile picado como la cebolla
  • 200 gramos de okra (es una verdura poco vendida en España. Cuenta con un sabor similar al de la berenjena, por lo que puedes optar por esta última en su lugar)
  • 1 kilogramo de hojas de batata u hojas de yuca (según el producto que encuentres/prefieras)
  • 4 dientes de ajo picados
  • 75 mililitros de aceite de oliva (la receta original emplea aceite de palma, pero os desaconsejamos emplearlo, debido a que es perjudicial para la salud)
  • Sal
  • 15 mililitros de zumo de limón
  • 2 calabacines (cortados en rodajas)

La forma de preparar el calulu es muy sencilla. Lo primero que tienes que hacer es lavar, a conciencia, el pescado ahumado y seco, meterlo en un cuenco, en el que, a continuación, verterás agua hirviendo.

Transcurridos 20 minutos, vuelca el cuenco en un escurridor. Libre de agua, vuelve a poner el pescado en el mismo bol y añade la misma cantidad de nueva agua hirviendo.

Al cabo de 60 minutos, podrás quitar, con total facilidad, la piel del pescado y, también, todas sus espinas.

Una vez libre de piel y espinas, sitúa, en una cazuela grande y en capas: okra o berenjena, pescado, cebolla, tomates, hojas de batata, rodajas de calabacín y ajo.

Seguidamente, agrega aceite, chile y sal (en los 3 casos, a tu gusto) y cuece todo a fuego lento 40 minutos. Cuando veas que el ya calulu está tierno, ¡ya lo tendrás listo para servir!


Akwadu, pura esencia de Guinea Ecuatorial

Acercarse a África por la vía gastronómica es una experiencia maravillosa para localizar puntos en común entre las culturas europea y africana y desarrollar la empatía entre las 2 formas de ver y entender el mundo.

Para ello, está la vía del salado (la de los platos anteriores) y la siempre bienvenida del dulce, como la guineana receta del Akwadu.

Guinea Ecuatorial, además, fue, desde finales del siglo XVIII hasta 1968, colonia española. Por tanto, los puentes culturales entre este estado y España son más fuertes. Por ejemplo, la mayor parte de la población de Guinea Ecuatorial habla español, un de los 3 idiomas oficiales del país.

Volviendo al Akwadu, se trata de un plato dulce, elaborado con plátano, que suele tomarse en el desayuno, pero que tampoco va mal de postre o merienda.

Ingredientes:

  • 4 plátanos macho
  • 80 gramos de coco rallado
  • 150 mililitros de zumo de naranja
  • 50 gramos de azúcar
  • 40 gramos de mantequilla sin sal
  • Zumo de 2 limones
  • Canela y miel (ambas al gusto)

La elaboración del Akwadu es la más rápida de todas las recetas africanas de este artículo. Lo primero que debes hacer es precalentar el horno a 200 grados. Tras ello, pela los plátanos macho y córtalos en rodajas gruesas.

Cuando las tengas, deposítalas en una fuente de horno. A continuación, vierte sobre ellas los 40 gramos de mantequilla (previamente derretida al baño maría) y los zumos de limón y naranja.

Extiende un poco, con ayuda de una espátula, y, cuando se vea todo lo más uniforme posible, comienza a espolvorear el azúcar, el coco y la cantidad de canela que gustes.

Entonces, habrá llegado el momento de meter la fuente en el horno y dejar que se hornee durante 20 minutos.

Transcurrido ese tiempo, saca la bandeja y, sobre cada rodaja de plátano macho, vierte miel. Ya con ella añadida, vuelve a meter el ya Akwadu en el horno. Pon el modo parrilla y déjalo en el mismo unos 2 minutos.

Sabrás que este delicioso plato está listo cuando la parte superior esté ligeramente dorada.

Estas recetas son maravillosas, pero la gastronomía no es el único camino para que te acerques a África. De hecho, existen tantos como tu desees (histórico, arquitectónico, musical, económico, turístico…).

Por eso, si estos platos te han fascinado, pero no te ves con el ánimo para prepararlos, te recordamos los de nuestra carta para que vengas a L’Arruzz.

Y si quieres disfrutar de L’Arruzz, pero no te apetece comer en nuestro restaurante, ¡tranquilo! porque existen nuestros platos para llevar a casa.

Como siempre, lo que importa es dar unas cuantas alegrías a tu paladar y, en el caso particular del Día de la Industrialización de África, también tener presente este continente y reflexionar sobre ¡lo que puedes hacer para ayudarlo!












31 octubre 2018

Un menú de miedo para Halloween



¡La noche más terrorífica del año se acerca! Poco a poco Halloween se ha convertido en una costumbre tan española como ir a los cementerios el día de Todos los Santos. De esta manera, cristianismo y ritos paganos (muchos tampoco nos son tan ajenos. Recordemos a las meigas y bruxas de Galicia) se dan la mano, lo que ha traído consigo una fusión cultural.

Dentro de ella, destaca la importante aportación gastronómica que Halloween ha traído a nuestras vidas. Si antes de su desembarco en España, por estas fechas, comíamos buñuelos de viento, huesos de santo o chulas de calabaza, ahora, también, disfrutamos de manzanas caramelizadas, bizcocho o flan de calabaza, así como de recetas de aspecto “halloweenero”. Precisamente, a estas últimas dedicamos este artículo.

Para beber: zumo de naranja, zanahoria o grosella roja

Además del negro de las tinieblas y el blanco de los fantasmas, los 2 colores por excelencia de Halloween son el naranja de las calabazas y el rojo de la sangre, el alimento de los vampiros.

Por tanto, te recomendamos que si quieres tomar algo original en Halloween, en lugar de beber vino tinto (que puede hacer de sangre, desde luego), optes por el zumo de grosella roja.

Respecto al zumo de tonos naranjas, como la zanahoria no siempre gusta a los niños (o a los adultos), te proponemos sustituirlo o fusionarlo con zumo de naranjas. ¡Nutritivo y terrorífico!

De primer entrante: pequeñas calabazas de arroz

Para estas calabacitas necesitarás 150 gramos de arroz, colorante alimentario de tono naranja o salmorejo (según prefieras), aceitunas negras (sin hueso) y pimiento verde (para hacer los rabitos de las calabazas).

Si decides hacer las pequeñas calabazas con colorante alimentario, deberás ponerlo en el agua donde cuecas el arroz y, a continuación, dejar que hierva y verter el arroz. En cambio, si has decidido poner salmorejo, te aconsejamos que lo añadas cuando estés emplatando.

Cuando el arroz esté listo, ponte aceite de oliva en las manos y comienza a hacer bolitas con el arroz. Una vez tengas 10-12, corta las aceitunas con las clásicas formas que adoptan los ojos, narices y bocas de las calabazas de Halloween y resérvalas.

En una fuente, pon las bolas de arroz (si van a ser con colorante, tu arroz ya será naranja), vierte por encima, con cuidado, el salmorejo justo para teñir, “pega” las aceitunas negras y en la parte superior de las ya mini calabazas, sitúa el tallo elaborado con pimiento. Si el pimiento no te entusiasma, siempre puedes emplear el tallo de manzanas.

De segundo entrante: sushi tenebroso

Esta receta tiene el punto gourmet que toda celebración necesita. Preparar sushi, como ya te contamos hace un tiempo, no entraña gran dificultad.

Por tanto, una vez tengas hechas las bolas, al igual que en el plato anterior, te toca hacer de ellas monstruitos o motivos típicos de Halloween.

Para simular una calabaza, en este caso, utilizarás salmón ahumado. Los ojos, nariz y boca de la misma puedes elaborarlos con hojas de alga nori o con trufa negra (la salada, no la dulce).

Otro adorno “halloweenero” puede ser una telaraña en un rincón oscuro. Entonces, por encima de la bola, sitúa y extiende caviar y, para crear los diferentes hilos, emplea lonchas de queso (previamente, cortadas en tiras finitas y pequeñas). Las telarañas son formas perfectas, pero esto es Halloween, cuanto más caótica, mejor, dará más miedo.

¿Qué pasa con el monstruo de Frankenstein? Pues que es una de las bolas de sushi más sanas. La criatura a la que dio vida la escritora británica Mary Shelley es verde en las películas. Por tanto, puedes conseguirla con guacamole (cara) y pimienta (ojos, nariz y boca) o con un pedazo de hoja de lechuga (o acelga, o espinaca…) y caviar. Para los clavitos que cosen la cara del monstruo, lo mejor es optar por palitos de zanahoria.

De plato principal: hamburguesa “acalabazada“ con queso y tomate

Esta es de las recetas de Halloween más rápidas de preparar. Te recomendamos que sirvas las hamburguesas poco hechas, para que se marque más la parte roja y desprendan jugo.

Por encima de la carne, sitúa una loncha de queso (con la nariz, ojos y boca recortadas), y luego, restriega un tomate por encima. ¡Así tendrás una deliciosa calabaza podrida!

De postre: brownie de sepultura

Para finalizar tu menú de miedo de Halloween, nada mejor que una muerte por chocolate en forma de cementerio.

El procedimiento es el siguiente: preparar un brownie y, después, situar los complementos tenebrosos.

Los ingredientes necesarios para el brownie son 100 gramos de mantequilla, 4 huevos, 250 gramos de chocolate (es preferible negro), 100 gramos de azúcar, 2,5 gramos de bicarbonato sódico, 78 gramos de harina de trigo para postres y 70 gramos de nueces.

En un bol, introduce el chocolate (derretido en al baño maria o microondas) y la mantequilla. Remueve hasta que se fundan y pon el horno a calentar a 170ºC.

Mientras se precalienta, en un tiempo de unos 10 minutos, en un recipiente diferente al del chocolate y la mantequilla, integra los 4 huevos, los 100 gramos de azúcar y bate todo. Cuando se empiece a generar espuma, vierte estos ingredientes en el bol del chocolate y bate todo, de nuevo.

Con la ayuda de un tamizador, distribuye la harina por encima en 5 tandas, es decir, tras cada tanda, remueve para que la harina se integre y no genere grumos. Al terminar con este proceso, tritura las nueces y agrégalas.

A continuación, en una bandeja, pon papel vegetal por el fondo y las paredes y fíjalo con mantequilla. Después, vierte toda la masa y mete la bandeja en el horno. Déjalo a la temperatura que estaba durante 30 minutos.

Transcurrido ese tiempo, saca el ya brownie del horno, deja que enfríe un poco y desmolda. Antes de sacarlo a la mesa, crea el cementerio en su superficie.

Para ello, basta con que distribuyas galletas de chocolate trituradas (harán el efecto de tierra), insertes galletas rectangulares a modo de tumbas y coloques pedazos de frambuesas por la tierra y las lápidas, como si fuera sangre. ¡Terricioso!

¿Qué te parece el menú para Halloween que te proponemos? Te llevará poco tiempo y, con él, harás las delicias de pequeños y mayores. Eso sí, si prefieres librarte de cocinar ese día, recuerda que siempre puedes venir al restaurante de L’Arruzz a quedarte muerto con nuestra carta.

Y, por si tienes miedo a dejarte ver, durante bastante tiempo en un mismo sitio, estos tenebrosos días (¿quién sabe si nuestro restaurante puede ser objetivo zombie?) y prefieres comer en tu hogar, aquí te dejamos nuestros platos para llevar a casa.